En el embarazo se busca el bienestar y la distensión del cuerpo y del psiquismo, así como la paz interior y la confianza. El contacto con la respiración, la interiorización, la visualización, la meditación, van a contribuir a dar luz a ese resplandor único de la mujer en cinta.
Las Yoga se imparten en dos niveles, uno para embarazadas de menos de 28 semanas con el objetivo de «dejar que las cosas se hagan» y «fortalecer». El segundo nivel que está dirigido a embarazadas de más de 28 semanas, se pretende que la mujer esté en contacto íntimo con ella misma y con su bebé.
Caso que quieras compartir una clase con tu pareja, donde se realizará una simulación del día del alumbramiento de tu bebé, no dudes en pedir cita.